El 18 de octubre de 2023, el líder chino, Xi Jinping, anunció la Iniciativa Global para la Gobernanza de la IA, un conjunto de principios y recomendaciones para gobernar al mundo a través de la IA.
De hecho, la IA se está convirtiendo en un recurso de inmensos alcances a nivel minimalismo, y con ellos los riesgos serían de implicaciones globales.
Pero que sea el régimen comunista chino el que lo promueve a esa escala es el mayor de los riesgos, dada la terrible trayectoria de violaciones a los derechos humanos que ha generado durante los cien años de su existencia.
Un informe, publicado el jueves por el Centro de Compromiso Global del Departamento de Estado, acusa al gobierno chino de utilizar una combinación de tácticas en un intento por crear un mundo en el que Beijing, ya sea explícita o implícitamente, controle el flujo de información crítica.
El objetivo de China es “fomentar un ecosistema de información en el que la propaganda y la desinformación de la República Popular China ganen fuerza y se vuelvan dominantes”, afirma el informe, de acuerdo con VOA.
Y agrega: “Si no se controlan, los esfuerzos de la República Popular China remodelarán el panorama informativo global, creando parcialidades y brechas que incluso podrían llevar a las naciones a tomar decisiones que subordinen sus intereses económicos y de seguridad a los de Beijing”.
- Garantizar que la IA se desarrolle de manera segura y responsable: Un enfoque multilateral puede ayudar a evitar que la IA se utilice para fines dañinos.
- Promover la equidad y la inclusión: Un enfoque multilateral puede ayudar a garantizar que la IA beneficie a todos, independientemente de su origen o circunstancias.
- Fomentar la innovación: Un enfoque multilateral puede ayudar a compartir ideas y conocimientos, lo que puede conducir a una innovación más rápida y eficaz.
No obstante, la gobernanza de la IA plantea una serie de desafíos, entre ellos:
- La rápida evolución de la tecnología: La IA es una tecnología compleja que evoluciona rápidamente. Esto puede dificultar el desarrollo de normas y regulaciones que sean relevantes y sostenibles.
- La diversidad de intereses: Los países tienen intereses diferentes en la IA. Esto puede dificultar el acuerdo sobre principios y normas comunes.
- La falta de transparencia: La IA a menudo se utiliza en sistemas que no son transparentes. Esto puede dificultar el control y la supervisión de la IA.
Desconfianza hacia el régimen chino
En septiembre, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) advirtió que adversarios como China están “buscando socavar la confianza en nuestras instituciones gubernamentales, la cohesión social y los procesos democráticos y están utilizando la inteligencia artificial para crear campañas de información errónea, desinformación y malinformación más creíbles”.
Además, una de las primeras preocupaciones fue que la falta de respeto por la privacidad de China (ya sea de sus propios súbditos o de ciudadanos extranjeros) le permitiría compilar bases de datos gigantescas para alimentar programas de inteligencia artificial en crecimiento, adelantándose a las empresas estadounidenses y europeas sujetas a reglas de privacidad de datos.
Los estándares éticos laxos del Partido Comunista chino rápidamente dieron lugar a horribles ejercicios de vigilancia impulsada por IA, incluida la investigación de sistemas de reconocimiento facial de IA que permitirían a los tiranos de Beijing rastrear y monitorear a poblaciones minoritarias “problemáticas” como los tibetanos y los musulmanes uigures, de acuerdo con Slay News.
Un mundo en el que China establezca los estándares para la “gobernanza de la IA” sería un mundo en el que todos, excepto la élite política, serían monitoreados por implacables ojos electrónicos a cada hora del día.
Escrito por José Hermosa para VCS Radio.net.
Imagen de portada (Toma de YT / L@lugaresfantasticos).
También le podría interesar: +