Cheng Peiming, practicante de Falun Dafa, ofrece un estremecedor testimonio sobre su detención, tortura y sustracción forzada de órganos en China durante una conferencia en Washington D.C.
En una conferencia de prensa el 3 de julio de 2024, el Sr. Cheng Peiming, practicante de Falun Dafa, ofreció un conmovedor testimonio sobre sus experiencias de detención, tortura y sustracción forzada de órganos en China. Este evento, celebrado en la capital de los Estados Unidos, atrajo la atención de funcionarios y defensores de los derechos humanos, quienes denunciaron estas atrocidades y exigieron rendición de cuentas del Partido Comunista Chino (PCCh).
Cheng Peiming, originario de la ciudad de Jixi en la provincia de Heilongjiang, comenzó a practicar Falun Dafa en 1998. Sin embargo, cuando el PCCh inició su represión contra esta práctica espiritual en 1999, fue arrestado cinco veces por su creencia. En diciembre de 2001, fue sentenciado a ocho años de prisión, donde sufrió torturas brutales y sustracción forzada de órganos.
Durante la conferencia, el Sr. Cheng mostró la cicatriz de una incisión en el costado izquierdo de su torso, evidencia de la cirugía forzada a la que fue sometido. Relató cómo, a pesar de estar en buen estado de salud, fue trasladado al Cuarto Hospital de Daqing en noviembre de 2004, El Sr. Cheng recordó lo que le sucedió el 16 de noviembre de 2004 donde le extrajeron partes de sus órganos. A pesar de negarse a firmar el consentimiento para la operación, fue anestesiado a la fuerza por seis guardias.
“Aunque estaba bien mentalmente y no sufría problemas de salud, los funcionarios me enviaron al Cuarto Hospital de Daqing a las 8 p. m. Los guardias le dijeron a mi familia que en mi estado podía morir, y que la probabilidad de que muriera en la operación sería del 80%”, dijo.
El testimonio del Sr. Cheng reveló la gravedad de estas prácticas. Describió cómo, tras despertar de la operación, encontró su tobillo derecho esposado a la cama del hospital y varios tubos conectados a su cuerpo. Fue devuelto a la prisión de Daqing y, posteriormente, llevado a la clínica de la prisión, donde le quitaron los puntos de sutura.
“Tosía todos los días. Sentía dolor y entumecimiento en las costillas de mi costado izquierdo. No podía incorporarme. Incluso en este momento me siguen doliendo el brazo izquierdo y las costillas, sobre todo en los días de lluvia o cuando me canso. El dolor es insoportable”, dijo.
En marzo de 2006, las autoridades intentaron someterlo a otra operación en el Hospital Longnan de Daqing. Sin embargo, Cheng logró escapar a través de la escalera de incendios. Con la ayuda de otros practicantes de Falun Dafa, huyó de la provincia de Heilongjiang, mientras la policía lanzaba una intensa búsqueda con una recompensa de 50,000 yuanes por su captura.
Cheng finalmente encontró refugio en Estados Unidos en 2020, donde los exámenes médicos confirmaron la extracción de partes de su hígado y pulmón. Ahora, busca sensibilizar al mundo sobre la brutal persecución y la sustracción forzada de órganos patrocinada por el estado chino.
Tras informarse sobre la sustracción forzada de órganos en el sitio web de Minghui el 9 de marzo de 2006, se quedó aterrorizado. “Me estremecía cada vez que recordaba mi experiencia en el hospital. Durante los dos meses siguientes, no me atrevía a quitarme la ropa ni para dormir. Llegué a entender lo que significaba la ‘cirugía de trasplante de órganos’ en el Hospital de Daqing en 2004”.
Luego de escapar de China en 2015, Cheng recibió ayuda del gobierno de EE.UU. y finalmente llegó a EE. UU. en 2020. “Después de una serie de exámenes médicos, los médicos confirmaron que me habían extraído parte del hígado y del pulmón”, dijo Cheng. “Vine a Estados Unidos para contar mi trágica experiencia y arrojar luz sobre esta brutal persecución del PCCh, especialmente sobre el crimen de la sustracción forzada de órganos. Espero que más personas de buen corazón puedan reconocer la naturaleza malvada del PCCh, me protejan y pongan fin urgentemente al atroz crimen de la sustracción forzada de órganos del PCCh. Le doy las gracias al gobierno de Estados Unidos”.
Reacciones Internacionales y Legislación
La Cámara de Representantes de los Estados Unidos aprobó la Ley de Protección de Falun Dafa (H.R. 4132) el 25 de junio, condenando la persecución y pidiendo sanciones contra los implicados. Durante la conferencia, figuras como Sam Brownback, exembajador para la Libertad Religiosa Internacional, y Robert Destro, ex subsecretario de Estado para la Democracia, los Derechos Humanos y el Trabajo, emitieron declaraciones en apoyo del Sr. Cheng y en condena de las prácticas del PCCh.
Destro escribió: “Con base en la información proporcionada, incluidas las imágenes, determiné que el caso ameritaba una investigación más profunda y puse en marcha el proceso a través del cual vino a los Estados Unidos para ser examinado e investigado más a fondo”.
“La sustracción forzada de órganos es una forma horrible de tráfico de personas. También hay mucha documentación de que ocurre, con el patrocinio y el estímulo del Estado, en la República Popular China. Todas las personas de buena voluntad deben condenarla”, escribió en su declaración.
El senador estadounidense Bob Menéndez también se unió a la causa, pidiendo la liberación inmediata de todos los practicantes de Falun Dafa detenidos injustamente en China. En su declaración, destacó la importancia de respetar las creencias y prácticas religiosas de todos los ciudadanos chinos.
Artículo escrito con información de Minghui.org
También puede leer: