Invasión Silenciosa: Cómo las Bandas Criminales Extranjeras se Han Apoderado de EE. UU.
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En los últimos tres años y medio, los republicanos han alertado sobre una invasión a través de la frontera sur de Estados Unidos. La realidad de bandas criminales extranjeras controlando mercados ilegales y explotando a migrantes evidencia la gravedad de esta situación. Conoce más sobre el auge de las mafias chinas, la expansión de los carteles mexicanos, la amenaza del Tren de Aragua y las pandillas chilenas en nuestro análisis detallado
En los últimos tres años y medio, los republicanos han insistido en que Estados Unidos está siendo invadido a través de su frontera sur. Esta afirmación no carece de fundamento, ya que la presencia de bandas criminales extranjeras en el país ha aumentado notablemente, aprovechando leyes laxas y la crisis migratoria para expandir sus operaciones ilegales.
El Auge de las Mafias Chinas
Recientemente, se ha revelado que el crimen organizado chino está dirigiendo lucrativas granjas de drogas con mano de obra esclava en varios estados de EE.UU. Según ProPublica, estas mafias han tomado control del mercado ilegal de marihuana, usando métodos violentos y explotando a migrantes chinos que cruzan la frontera sur.
Los informes indican que miles de inmigrantes chinos son forzados a trabajar en condiciones inhumanas en estas granjas, rodeados de cámaras, vallas y guardias armados. Esta situación se ha desarrollado rápidamente desde que algunos estados, como Oklahoma, legalizaron el cultivo y venta de marihuana medicinal sin una regulación adecuada.
“Una sombría consecuencia de esta servidumbre por contrato: los traficantes obligan a las mujeres inmigrantes chinas a prostituirse para los jefes de la fuerza laboral agrícola”, señala el reportaje.
Los Carteles Mexicanos y su Expansión
Los carteles mexicanos, especialmente el Cártel de Sinaloa y el Cártel de Jalisco Nueva Generación, han establecido presencia en todos los estados de la unión. La Agencia Antidrogas de EE.UU. (DEA) reporta que estos carteles son responsables de la crisis de drogas más grave en la historia del país, controlando el flujo de casi todas las drogas ilícitas, incluido el fentanilo y la metanfetamina.
Estos grupos utilizan la crisis migratoria para fortalecer sus operaciones, explotando a migrantes vulnerables y extendiendo su control sobre el territorio estadounidense.
La Amenaza del Tren de Aragua
El Tren de Aragua, una banda venezolana de rápido crecimiento, también ha logrado infiltrarse en varias ciudades importantes de EE.UU. Esta organización criminal está vinculada a más de 100 investigaciones en curso y se ha especializado en delitos como el robo de celulares y fraudes bancarios. Su modus operandi incluye el reclutamiento de migrantes venezolanos, quienes son atraídos por promesas de trabajo y luego coaccionados a participar en actividades delictivas.
“El Tren de Aragua es el grupo de crimen organizado transnacional que está creciendo con mayor velocidad en todo el mundo. Hace unos seis años atrás tenían presencia en dos países, en América del Sur, y en la actualidad tienen presencia en diez países en todo el hemisferio occidental, incluso en Estados Unidos”, afirmó Humire a Voz Media. Además, explicó que la pandilla ha provocado inestabilidad en naciones como Perú, Colombia y Chile, y por eso Estados Unidos debe tomar muy en serio esta amenaza.
Pandillas Chilenas y el Turismo Delictivo
Otro fenómeno preocupante es el de las bandas chilenas que se dedican al “turismo delictivo”. Estas pequeñas pandillas, aprovechando el Programa de Exención de Visa entre EE.UU. y Chile, ingresan al país para cometer robos en mansiones de lujo. Operan con gran eficacia, utilizando técnicas avanzadas para evitar sistemas de seguridad y aprovechar las ausencias de los propietarios.
La Amenaza Terrorista
No solo las bandas criminales representan una amenaza; también hay indicios de que terroristas extranjeros podrían estar ingresando al país. En junio, ocho migrantes de Tayikistán, potencialmente vinculados a ISIS, fueron detenidos después de cruzar la frontera sur. Esta situación subraya el riesgo de que individuos con intenciones terroristas aprovechen la crisis migratoria para infiltrarse en Estados Unidos.
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