Un grupo de 31 exjefes de Estado solicita a la Corte Penal Internacional la detención de Nicolás Maduro por su rol en los crímenes de lesa humanidad cometidos en Venezuela. La denuncia destaca la estructura militar represiva y el terrorismo de Estado.
En un reciente pronunciamiento, 31 exjefes de Estado de diversas naciones han solicitado a la Corte Penal Internacional (CPI) la detención inmediata de Nicolás Maduro, dictador de Venezuela. El comunicado, que reúne a destacados líderes internacionales, denuncia la existencia de un régimen militar represor en Venezuela, caracterizado por la implementación de políticas de terrorismo de Estado y la violación sistemática de los derechos humanos.
La solicitud fue realizada a raíz de las evidencias presentadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y otros informes, que detallan cómo la estructura militar del país ha estado involucrada en crímenes de lesa humanidad. Los exlíderes argumentan que estas acciones están directamente vinculadas a la cadena de mando liderada por Nicolás Maduro, quien, en su rol como comandante en jefe, habría permitido y facilitado la represión violenta contra la población civil.
Entre los firmantes de la petición se encuentran reconocidos expresidentes de América Latina y España, tales como Eduardo Frei (Chile), José María Aznar (España), Felipe Calderón (México), Iván Duque (Colombia), Mauricio Macri (Argentina) y Laura Chinchilla (Costa Rica). Estos exmandatarios, pertenecientes al Grupo IDEA (Iniciativa Democrática de España y las Américas), han enfatizado la urgencia de la intervención de la CPI, argumentando que la comunidad internacional no puede seguir ignorando los atropellos perpetrados por el régimen venezolano.
En su petición, los exjefes de Estado también hacen mención a la orden de detención contra el activista Edmundo González Urrutia, como un ejemplo de las medidas represivas empleadas por las fuerzas militares venezolanas para silenciar a los opositores y activistas.
Este llamado busca, además, generar conciencia sobre el sufrimiento de la población venezolana, que ha sido víctima de un deterioro masivo de sus derechos fundamentales, mientras el régimen se mantiene en el poder a través del uso de la fuerza y la intimidación. La acción coordinada de los exmandatarios demuestra la creciente presión internacional sobre Maduro y sus aliados, en un contexto en el que las denuncias por crímenes de lesa humanidad continúan acumulándose.
Este pronunciamiento refuerza la necesidad de una respuesta global firme ante la situación en Venezuela, y reitera la importancia de la justicia internacional en la protección de los derechos humanos. Con la intervención de la CPI, los firmantes esperan que se avance hacia la rendición de cuentas de aquellos responsables de los crímenes denunciados, incluyendo al propio Nicolás Maduro.
Artículo escrito con información de Mundo Libre Diario
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