El Departamento de Estado de los Estados Unidos hizo público su Informe Anual 2018 sobre Libertad Religiosa Internacional en la tarde del 21 de junio de 2019. Al igual que en años anteriores, el informe enumera a China como un “país de especial preocupación” (CPC) en virtud de la Ley de Libertad Religiosa Internacional de 1998 por haber cometido o tolerado violaciones particularmente graves de la libertad religiosa.
Pompeo: Los perpetradores serán obligados a rendir cuentas
El secretario de estado Mike R. Pompeo dijo en el comunicado de prensa: “Estoy orgulloso de estar aquí hoy para hablar sobre la misión en curso del Departamento de Estado de promover la libertad religiosa internacional”.
“Esta misión no es solo una prioridad de la administración de Trump -es una misión profundamente personal. Durante muchos años, fui maestro de escuela dominical y diácono en mi iglesia”.
También dijo: “Como en años anteriores, nuestro informe expone una escalofriante serie de abusos cometidos por regímenes opresores, grupos extremistas violentos y ciudadanos individuales. Para todos aquellos que pisotean la libertad religiosa, diré esto: Los Estados Unidos están observando y se les pedirá que rindan cuentas”.
“Y en China, la intensa persecución del gobierno a muchas religiones -practicantes de Falun Dafa, Cristianos y Budistas Tibetanos entre ellos- es la norma”, explicó. “El partido comunista chino ha mostrado una hostilidad extrema hacia todas las creencias religiosas desde su fundación. El partido exige que solo él sea llamado Dios”.
El embajador en misión especial de Estados Unidos para la Libertad Religiosa Internacional, Sam Brownback, dijo: “China ha declarado la guerra a la fe. Hemos visto el creciente abuso del gobierno chino hacia los practicantes de casi todas las creencias y desde todas las regiones del continente”.
Condenó la sustracción de órganos autorizada por el gobierno del PCCh a prisioneros de conciencia vivos, incluyendo a practicantes de Falun Dafa, Uigures, Budistas Tibetanos y Cristianos “clandestinos”, y agregó que esta atrocidad debería conmocionar la conciencia de todos.
Brownback le dijo al régimen comunista chino: “No se equivoquen, no ganarán su guerra contra la fe. Esto tendrá consecuencias para su situación en casa y en todo el mundo”.
El informe destaca la persecución a Falun Dafa
El Informe Anual dice: “Antes de la prohibición del gobierno [chino] a Falun Dafa en 1999, el gobierno estimaba que había 70 millones de practicantes. Fuentes de Falun Dafa estiman que decenas de millones de personas siguen practicando en privado, y Freedom House lo estima entre 7 y 20 millones de practicantes”.
Al describir los casos cometidos por las autoridades chinas “sometiendo a personas a muerte, desapariciones forzadas y sustracción de órganos en prisión por sus creencias o afiliación religiosa”, el informe se refiere a un caso publicado en Minghui.org de Ye Guohua, quien fue arrestado y torturado por hacer los ejercicios de Falun Dafa. Tres días antes de morir bajo custodia policial, su familia “informó que estaba en coma y su cuerpo estaba hinchado”. Cuando otro practicante preguntó sobre la causa de su muerte, el personal del centro de detención dijo: “Está muerto, así que no hay nada que se pueda hacer. Preguntar sobre esto es solo buscar problemas”.
El informe también incluye otro caso identificado en Minghui: “El 4 de julio, las autoridades arrestaron y detuvieron a Ma Guilan de la provincia de Hebei por hablar con la gente sobre Falun Dafa. El 17 de septiembre, las autoridades dijeron que Ma se enfermó repentinamente y la llevaron al hospital donde murió horas después. Según el informe, varios funcionarios fueron al hospital y le extirparon los órganos a Ma para examinarlos, aunque no está claro qué ha sido de esos órganos”.
Los practicantes de Falun Dafa detenidos en China son sometidos a diversos métodos de tortura física y psicológica, como la privación del sueño, en un intento de obligarlos a renunciar a sus creencias.
En el informe se citan cifras de Minghui según las cuales las autoridades acosaron a 4.127 practicantes y detuvieron a 4.848, de los cuales 2.414 seguían detenidos a finales de año.
Continuando con el asesinato en la sustracción órganos por parte del régimen chino, el informe prosigue: “The Wall Street Journal informó que las autoridades chinas han sometido a los prisioneros de conciencia, incluyendo a Falun Dafa, Uigures, Budistas Tibetanos y Cristianos ‘clandestinos’, a la sustracción forzada de órganos. Los exprisioneros declararon que mientras estaban detenidos, las autoridades los sometían a análisis de sangre y exámenes médicos inusuales que luego se agregaban a una base de datos, lo que permitía realizar trasplantes de órganos bajo demanda”.
“El 10 de diciembre, un tribunal independiente establecido por la ONG internacional Coalición Internacional para Acabar con el Abuso de Trasplantes en Chinaemitió un fallo provisional en el sentido de que el grupo estaba “seguro -por unanimidad y más allá de toda duda razonable- de que en China se ha estado practicando la sustracción forzada de órganos a prisioneros de conciencia desde hace un período de tiempo considerable, involucrando un número muy importante de víctimas”.
“The Globe and Mail informó en septiembre que las autoridades torturaron a una ciudadana canadiense que practicaba Falun Dafa durante su detención preventiva de 18 meses en Beijing. Durante su detención, las autoridades habrían privado inicialmente a la persona de alimentos y agua y, más tarde, la empujaron al suelo y la rociaron con pimienta. Las autoridades la arrestaron en febrero de 2017 bajo la acusación de “organizar o utilizar una secta para socavar la aplicación de la ley”. Después del arresto, su esposo, quien ella dijo que creía que la había entregado a las autoridades, supuestamente transfirió todas sus propiedades y acciones de la compañía a su nombre”.
El informe también cita un artículo de La Gran Época que dice que los oficiales de seguridad de la provincia de Sichuan detuvieron a 78 practicantes de Falun Dafa durante los primeros seis meses de 2018.
Las ONG internacionales afiliadas a Falun Dafa y los medios de comunicación internacionales informaron que las detenciones de practicantes de Falun Dafa continuaron aumentando en torno a fechas “sensibles”. Las autoridades ordenaron a las comunidades vecinales que reportaran a los practicantes de Falun Dafa a los funcionarios”.
El informe indica que “el paradero de Gao Zhisheng seguía siendo desconocido, aunque los medios de comunicación informaron de que se creía que seguía bajo custodia de la policía de seguridad del estado. La policía detuvo a Gao, un abogado de derechos humanos que había defendido a miembros de grupos cristianos, practicantes de Falun Dafa y otros grupos, en septiembre de 2017”.
El informe anual registra la persecución a Falun Dafa y otras creencias alrededor del mundo desde el 1 de enero al 31 de diciembre de 2018. El Informe será presentado al Congreso de los Estados Unidos de América. Fuente Minghui.org