Actividades que ayudan a trabajar las emociones de los niños te menciona a través de divertidos juegos cómo enseñarles a identificarlas, su importancia y algunos consejos que pueden serte útiles. Puedes leer o escuchar la nota a continuación…
¿Alguna vez te has preguntado cómo ayudar a tu hijo a entender por qué se siente triste, enojado o feliz?
Los niños experimentan una serie de emociones durante su etapa de desarrollo, por ello, es importante ayudarles a trabajar sus emociones y a desarrollar una inteligencia emocional.
La inteligencia emocional es una habilidad fundamental, les permitirá afrontar los desafíos de la vida con mayor facilidad. De tal manera que, desde pequeños empiecen a entender cada emoción, aprendiendo a conocerse a sí mismos.
En este artículo, te presentaremos una serie de actividades divertidas y educativas que puedes realizar con tus hijos para ayudarlos a reconocer, expresar y gestionar sus emociones de manera saludable.
¿Por qué es importante enseñar a los niños a gestionar sus emociones?
Entender y gestionar las emociones es como aprender a montar en bicicleta: al principio es difícil, pero con práctica y paciencia, se convierte en una habilidad natural.
Al enseñar a nuestros hijos a identificar y expresar sus sentimientos, les estamos proporcionando las herramientas necesarias para:
- Mejorar sus relaciones sociales: Los niños que saben gestionar sus emociones tienden a tener relaciones más saludables con sus compañeros y familiares.
- Aumentar su autoestima: Al reconocer y aceptar sus sentimientos, los niños desarrollan una mayor confianza en sí mismos.
- Reducir el estrés: Aprender a manejar las emociones de manera saludable ayuda a los niños a reducir los niveles de estrés y ansiedad.
- Tomar mejores decisiones: Los niños que son capaces de identificar y controlar sus emociones son capaces de tomar decisiones racionales y resolver problemas.
- Evitar la depresión: Al saber gestionar lo que sienten, son capaces de afrontar cada situación con madurez y ver la vida de manera positiva, evitando caer en estados que los estanquen o perjudiquen.
Actividades para trabajar las emociones en los niños
1. El semáforo de las emociones
Materiales: Cartulinas de colores (rojo, amarillo y verde), imágenes o dibujos que representan diferentes emociones.
Cómo se juega: Crea un semáforo con las cartulinas y pega las imágenes de las emociones en cada color.
- Rojo: Para emociones fuertes como la ira, miedo, tristeza, ansiedad o frustración.
- Amarillo: Para emociones intermedias como la confusión o la sorpresa.
- Verde: Para emociones positivas como la alegría o la calma.
Cada vez que tu hijo sienta una emoción, pídele que se coloque delante del color correspondiente y que explique por qué se siente así.
2. El diario de las emociones
Materiales: Un cuaderno o libreta, lápices de colores.
Cómo se juega: Anima a tu hijo a escribir o dibujar en su diario cómo se siente cada día. Puede utilizar palabras, frases, dibujos o cualquier otra forma de expresión que le resulte cómoda. Esta actividad le ayudará a identificar patrones en sus emociones y a comprender mejor lo que las desencadena.
3. La caja de los sentimientos
Materiales: Una caja decorada, objetos que representan diferentes emociones (una pelota para la alegría, un pañuelo para la tristeza), etc.
Cómo se juega: Llena la caja con objetos que representan diferentes emociones. Cuando tu hijo se sienta abrumado, pídele que elija el objeto que mejor represente su sentimiento en esos momentos, y que sea capaz de hablar sobre ello.
4. Cuentos y juegos de rol
Materiales: Libros con historias sobre emociones y disfraces.
Cómo se juega: Lee cuentos con tus hijos que hablen sobre diferentes emociones y después juega a representar los personajes y sus sentimientos. Esta actividad les ayudará a desarrollar su empatía y a comprender las emociones, así mismo lo que sienten los demás.
En la sección de cuentos de la Abue, podrás encontrar una variedad de cuentos en audio que son divertidos, educativos y con gran enseñanza para los niños. Estos cuentos pueden ayudarlos a simpatizar, reflexionar y entender aún más las emociones.
5. La respiración profunda y la relajación
Materiales: Música relajante, una colchoneta o una manta.
Cómo se juega: Enséñale a tu hijo técnicas de respiración profunda y relajación para que pueda calmarse cuando se sienta nervioso o ansioso. Puedes utilizar música relajante o realizar ejercicios de meditación o visualización guiados.
6. Tablero de las emociones
Materiales: Cartulina, colores, lápices, marcadores y dados.
Cómo se juega: Crea un tablero con tu hijo donde dibujen los personajes de la película “Intensamente 2”. Son 10 personajes: Alegría, tristeza, enojo, desagrado, temor, ansiedad, vergüenza, envidia, aburrimiento y Nostalgia. Enumera a cada emoción con su nombre.
Los jugadores tiran los dados y según el número, deben realizar acciones como imitar la emoción del personaje que les ha tocado o contar una historia sobre una situación en la que han sentido esa emoción.
7. Emociones con Música
El portal guía infantil recomienda trabajar las emociones de los niños a través de la música.
Materiales: Bafle o equipo donde puedas colocar la música.
Cómo se juega: Debes elegir la lista de reproducción con diferentes ritmos (Música clásica, relajante, música infantil alegre, música un poco ruidosa, etc). Esto con el fin de que la música les transmita diferentes emociones.
Puedes jugar en familia o, con un grupo de niños. El grupo debe caminar a lo largo del espacio y según la música que suene deben interpretar la emoción que les genere ese tipo de música. Es decir, si es música relajante, deben caminar en calma y tranquilos, si es música fuerte deben saltar y moverse rápido, etc…
Al final de la actividad, puedes preguntar al grupo que experimentaron o qué les generó cada tipo de música y cómo los hizo sentir.
8. El “Soy tú”
Materiales: Disfraz, tarjetas y marcadores.
Cómo se juega: El jugador deberá disfrazarse de algún miembro de la familia o de su entorno y actuar como ese familiar. Puede añadirse tarjetas con los nombres de cada miembro para hacerlo más divertido, dinámico y elegir el personaje al azar.
Te puede interesar ¡Sembrando Fortaleza! Cómo Enseñar a los Niños a ser Personas Resilientes
Los padres también influyen con el ejemplo
La psicóloga infantil Begoña Ibarrola, miembro del grupo de expertos de guía infantil, menciona que el momento de ayudar a los niños a gestionar y educar sus emociones es desde que nacen.
“En realidad, antes de nacer, la madre debe cuidar su estado emocional también, porque el niño va a sentir todo lo que sienta la madre. Una vez que nace su comunicación es eminentemente emocional. No tiene otra forma de comunicarse que no sea a través de los gestos, del llanto, de la sonrisa. La cara va a indicar su estado emocional y el adulto es el que tiene que empatizar con el bebé”.
Ibarrola también enfatiza que educar las emociones hace parte del proceso de educarse, es decir, las emociones de los adultos junto con la de los niños. Los adultos no hemos aprendido a manejar las emociones y estas influyen enormemente en los hijos, de tal manera que son contagiosas.
Aunque en muchos casos, son los niños quienes terminan de contagiar a los adultos con estas emociones: casos de rabietas, enojo e ira por parte de los pequeños suelen desestabilizar emocionalmente a los padres.
Por ello Ibarrola recomienda que los adultos deben educar desde la calma y gestión emocional, a saber, influir positivamente a sus hijos con el ejemplo, a salir de una rabieta con el humor y la distracción.
Consejos para los padres
Reflexiona con la gestión de tus propias emociones: Para educar y ser ejemplo en la crianza, lo primero es corregir lo que como adultos no sería un ejemplo para los hijos. Reflexiona acerca de tus emociones, de cómo las expresas o que daño causas a los demás cuando no la controlas para que puedas corregir y sobrellevarla de una manera saludable para ti y para los que te rodean.
Sé paciente: Enseñar a los niños a gestionar sus emociones requiere tiempo y paciencia.
Sé un ejemplo: Los niños aprenden observando a los adultos. Muéstrale a tu hijo cómo manejar tus propias emociones de manera saludable.
Utiliza el humor y la distracción: Suelen ser muy útiles para evitar rabietas y que el niño no desarrolle a manera extrema estas emociones negativas como el enojo y la ira.
Haz que sea divertido: Las actividades para trabajar las emociones deben ser divertidas y atractivas para los niños.
Adapta las actividades a la edad de tu hijo: Las actividades deben ser apropiadas para el nivel de desarrollo de cada niño.
Recuerda que como padre o adulto aportas un gran aprendizaje en los niños, desde tu ejemplo y enseñanza les ayudas a que logren educar sus emociones y sentimientos.
El mundo requiere de personas y niños saludables, capaces de gestionar sus emociones, de sentir empatía, respeto, amabilidad, y, sobre todo, gratitud por lo que son y por la vida que tienen.
Al incorporar estas actividades en tu rutina diaria de crianza, estarás ayudando a tus hijos a desarrollar una mayor inteligencia emocional y a convertirse en adultos más felices y saludables.
Redacción, Sonia Montañez par VCSmedia.net
Locución y edición: Katia Comas
Puedes escuchar o leer más artículos de Familia y Valores haciendo click Aquí