Cómo hablar con tus hijos sobre temas difíciles puede ser crucial en su desarrollo, temas como la violencia, la muerte, el sexo, drogas y demás hacen necesario que como padres se brinde un acompañamiento para que los pequeños no formen inseguridades, temores o puedan llevarse ideas erróneas siendo aconsejados por otros no buenos, por ello, te diremos cómo abordar estos temas con tus hijos de la mejor manera posible. Puedes leer o escuchar la nota a continuación…
Hay que saber abordar algunos temas delicados con nuestros hijos pequeños. Ya sea sobre sexo, drogas, muerte, violencia, diferencias físicas, discapacidades, la pérdida de una mascota, o cualquier otro tema difícil, es importante conversar con ellos de una manera abierta, honesta y respetuosa.
De repente como padre puedes pensar. Qué tanto hace que nacieron y ya empiezan a preguntar, a cuestionarse o querer saber ciertas cosas sobre la vida…Pero debes abordar estos temas lo más pronto posible, cuanto antes mejor.
Consejos para saber hablar sobre temas difíciles
El portal Etapa infantil recomienda hablar con los pequeños sobre esos temas difíciles para explicarles los temas de manera sencilla y clara, así que presenta algunos consejos para lidiar con ese momento. No es sencillo, pero es necesario.
No evadas ciertos temas difíciles H3
Aunque parezca que quieres protegerlo, no le ocultes ni evites los temas difíciles, porque a largo plazo puede ser un error, ya que en su momento no enfrentaste el hecho de haberlos direccionado de la mejor manera. Además, puede ser que otros no buenos sean los que lo aconsejen, creándole inseguridades o temores que afectan el sano desarrollo de la personalidad y la salud mental.
Presta atención al espacio y el momento adecuado para hablarle
Aunque a veces no se encuentren las palabras adecuadas para hablarle a un niño, debes buscar el momento adecuado, con las palabras que él pueda entender y el espacio que pueda ser el mejor. También, a veces los niños suelen ser tímidos cuando hay personas a su alrededor, así que encuentra un ambiente íntimo para hablar.
Por ejemplo, para hablarle de la enfermedad de un familiar, el espacio debe ser tranquilo, sin interrupciones.
Debes indagar para saber qué conoce tu niño respecto al tema
Antes que nada, debes tener una confianza estable con tu hijo que permita que en una conversación él pueda contarte y ser abierto contigo.
Cuando vas a tratar un tema delicado, hay que saber qué tanto sabe el niño sobre el asunto, por esto hay que saber indagar comenzado con una pregunta como: ¿Qué entiendes tu sobre …? Debes escucharlo y animarlo a que te cuente, con ello sabrás cómo ir abordando el tema, y también poder corregir si de pronto ha escuchado cosas malas o tiene ideas o creencias erróneas.
Sé honesto siempre
Como padres debemos quitarnos la idea de que “las mentiras piadosas” son válidas. Enseñamos valores a los niños, y por ende siempre queremos que ellos sean honestos con nosotros, no podemos criar a los pequeños si no aplicamos lo que enseñamos.
Amortiguar las cosas a través de las mentiras u ocultarles información puede retrasarlos para que afronten la verdad. Sin embargo, habla solo lo que él pueda comprender y asimilar sin problema. No necesitas darle detalles de los temas, ya que puede afectar a tu hijo emocionalmente. Sobre todo, en el tema de muerte, no necesitas explicarle cómo murió un familiar detalladamente.
El diálogo debe ser de respeto y que no sea agresivo a su espíritu. Además, si le mientes a un niño tarde o temprano lo descubrirá y perderá la confianza en ti.
Pon atención a las reacciones del niño o a lo que quiere decir
Todos los niños son diferentes, reaccionan diferente conforme a sus emociones. Nadie mejor que tú conoce a tu hijo, si ves que al momento de hablar él se queda callado, talvez esté procesando la información o necesite más tiempo para asimilarla. De todas formas, monitorea lo que está pensando sin acosarlo, la idea es que puedas brindarle ese acompañamiento en las emociones, pensamientos o sentimientos que desarrolle para que todo en su mente y corazón esté bien.
También están los niños que quieren aclarar dudas y compartir lo que piensan, por ello, es importante escucharlos primero e ir despejando estas dudas, aunque parezcan simples. Recuerda que el tema nunca queda cerrado completamente, de seguro te preguntará más adelante otra cosa, o preguntará lo mismo.
Los niños son un gran campo de entrenamiento que nos recuerdan que la tolerancia, el respeto y el amor son las bases fundamentales en la crianza. Y como padres nos corresponde ser empáticos a sus emociones y necesidades.
Hoy en día no debemos asumir que los niños no saben o no entienden, a veces pueden llegar a sorprendernos lo rápido que pueden asimilar un tema, pero dependen de nosotros, los padres, saber cómo afrontar las diferentes situaciones de la vida y cómo gestionar sus emociones.
La clave de un niño feliz, radica en el amor, la comprensión y atención que le das respetando su desarrollo y logrando cuidar de su salud mental.
Redacción,VCSradio.net
Locución: Sonia Montañez
Puedes escuchar o leer más artículos de Familia y Valores haciendo click Aquí